domingo, 9 de septiembre de 2007

Manjares


Lo cierto es que en este bar del noroeste peninsular se come una raya que está de morirse. Tanto frita como cocida, el cartilaginoso animalito es presentado aquí con todo su sabor.
El sitio es tranquilo y pacífico como viene a atestiguarlo su patrón.

No hay comentarios: